Platiqué con una persona que estaba pasando por una fuerte crisis matrimonial. Entre su decepción y su dolor consideró separarse de su conyugue como una buena opción para procurar mejorar la relación personal (digamos que volvieran a saludarse cuando se vieran) que es lo socialmente elemental. Entre café y café me dijo que si su matrimonio terminaba al irse su pareja de la casa "sería para siempre, que no volvería jamás". A mí, la verdad, hasta se me hizo graciosa la declaración porque se le pasó la mano de drama. Nada más le faltó el acercamiento extremo de la cámara, la música de suspenso y que nos fuéramos directo a comerciales. Mucho del dolor que a veces sentimos nos lo provocamos nosotros mismos, nos autocastigamos con condenas perpetuas cuando mencionamos los famosos "para siempre, jamás o nunca". Lo único que es permanente en todo lo que nos rodea es que está siempre cambiando. Nada es lo mismo ayer que hoy o hace cinco minutos contra este momento en el que tecleo estas letras. - ¿Y por qué no volverá nunca?, -le pregunté- No me dejó de otra más que preguntarle que de qué novela ochentera se había aprendido la frase. Me veía con tremendos ojotes. Le pedí que no se obligara a sufrir de más y que usara la mente y el corazón para decidir lo que le convenía: solo así tomamos las mejores decisiones. Consejo Y precisamente con respecto a usar la mente y el corazón para decidir lo que mejor convenga en la vida, responde el test y analiza las respuestas. ¡Te será de gran ayuda! 1.- Invitas a un amigo al cine, te dice que no puede, entonces tú... 2.- Muy a gusto una amiga come unas papitas fritas. Le pides que comparta, te dice que no... 3.- Te quedaste esperando a que unos amigos pasaran por ti a las siete de la noche, pero nunca llegaron. Luego te explican que entendieron que tú llegarías
por tu cuenta... 4.- Te organizan una fiesta sorpresa, pero solo asisten el organizador y tú... Resultados: Mayoría de a: Príncipe o princesa del drama. Analiza un poco qué te mortifica y ve quitándole de a poquito hasta que puedas ver cuál es tu realidad. Mayoría de b: Reina o Rey del drama. ¡Qué barbaridad! Sería bueno que le bajaras dos rayitas a tu volumen, por el bien tuyo y de todos los que te rodean. Mayoría de c: Duquesa o duque del drama. Eliges el lado práctico de la vida. Resuelves con más frialdad tus dificultades. ¡Bien! Autor: Elsa de Hoyos, comunicóloga especializada en Relaciones Públicas. Actualmente se desempeña como redactora y traductora. |