Valientes, audaces, de gran carácter; con una gran capacidad de convocatoria y liderazgo, así son estas mujeres que han dejado huella en la historia
de su país y el mundo. Te invitamos a conocer un poco más de ellas. Rodoguna de Partia Rodoguna fue hija del rey parto Mitríades I (171-138 a.C.) y hermana de Fraates II. Se casó con el rey Seléucida Demetrio II Nicátor, que estaba prisionero en Partia, con quien tuvo varios hijos. En una ocasión, Rodoguna quedó a cargo de una parte del Imperio cuando estalló una rebelión. Llamó a los generales y ella misma se puso al frente de las tropas, combatiendo en primera línea y contribuyendo a conseguir una gran victoria. Tras el combate, la primera orden que dio fue que le preparasen un baño. Trieu Thi Trinh A los 20 años de edad, Trieu, mejor conocida como Lady Trieu, reunió a más de 1.000 hombres para rebelarse contra las fuerzas chinas que trataron de conquistar su patria durante el siglo III. Sobre un elefante de guerra y portando sus características dos espadas y su armadura dorada, Trieu consiguió ganarle la partida a los chinos hasta en 30 ocasiones, aunque no consiguió ganar la guerra. Se piensa que se suicidó a los 23 años. A pesar de este oscuro final, su legado sigue vivo. Zenobia de Palmira Presunta descendiente de Cleopatra llamada Julia Aurelia Zenobia. Historiadores de la época (siglo III d.C) la describen como inteligente, hábil y hermosa, destacando sus ojos negros y siempre brillantes. Hablaba griego, aramaico, egipcio y latín, y frecuentaba a escritores y filósofos.Trebelio Polión comenta que, sin perder una elegante femineidad, solía comportarse "como un hombre", bebiendo junto a los soldados de la guardia, cabalgando y cazando con su propio arco. Asume el trono de Palmira como regente, hasta que su hijo Vabalato llegue a la mayoría de edad. Inmediatamente se rebela contra Roma, conquista Egipto y responde a las tímidas protestas del prefecto romano de Alejandría decapitándolo. Invade territorios de Siria, Líbano y Palestina, ganándose el sobrenombre de "la reina guerrera" al acumular un triunfo tras otro. En pocos años crea un próspero imperio aprovechando las rutas comerciales, y Palmira vive un intenso florecimiento económico, cultural y artístico. Artemisia de Caria Hija de Lígdamis, rey de Halicarnaso y de una aristócrata cretense, Artemisia apoyó al rey persa Jerjes en su intento de conquista de Grecia durante la segunda guerra médica (480-479 a.C.). Artemisia contribuyó a la flota persa con cinco naves, de las que estuvo al mando como general, y participó en la batalla de Salamina. Su valor como estratega le ganó la admiración del Gran Rey persa, que al menos la consultó en dos ocasiones antes de la crucial batalla. Su hijo Lígdamis gobernó como rey de Halicarnaso entre los años 460-450 a.C. Zhao de Pingyang Era hija de Li Yuan, el emperador que fundó la dinastía Tang en el siglo VII. Mientras era gobernador, Li Yuan inició una revuelta contra el emperador Yang, de la dinastía Sui. Su hija Pingyang, de apenas veinte años, vendió las propiedades de la familia y reunió un ejército para apoyar la rebelión de su padre. Miles de hombres se unieron a ellos, y la joven llegó a comandar un ejército de hasta 70.000 soldados, logrando numerosas victorias gracias a su valentía y a sus conocimientos de estrategia militar. Ella y su ejército hicieron huir al ejército imperial. Su padre, al convertirse en emperador con el nombre de Gaozu, reconoció los méritos de su hija y celebró un gran desfile militar en su honor, además de otorgarle el título honorífico de zhao y de princesa. Reina Boudica La reina de los icenos levantó un ejército de más de 60.000 hombres contra las legiones romanas que ocupaban Britania y que la habían sometido a ella y a sus hijas a una terrible humillación tras la muerte de su esposo, el rey Prasutago. Boudica se puso al frente de sus tropas y las de los trinovantes, que se unieron a ella. Atacaron Camulodunum (la actual Colechester), lo mismo pasó con Londinium (Londres) y Veralamium (St. Albans). Al final, Suetonio Paulino logró vencer a los britanos en Watling, causando una terrible mortandad. Boudica sobrevivió a la batalla, pero, no pudiendo esperar clemencia de Roma, según Tácito, se suicidó ingiriendo veneno. Fu Hao Fu Hao era la esposa favorita del emperador Wu Ding (1250-1192 a.C.), de la mítica dinastía Shang. Actuó como suma sacerdotisa en ritos de adivinación y llegó a comandar un ejército de más de 13.000 hombres, que fue el mayor de China en su época. Combatió contra los bárbaros del otro lado de la frontera y derrotó a los jiang, los principales enemigos de su esposo. También luchó contra los tu y los yi, a los que venció. La historia militar china destaca su victoria ante la tribu de los ba, que destaca como un ejemplo de estrategia. A su muerte, fue enterrada en una magnífica tumba, descubierta en 1976, que contenía un completo ajuar funerario, en el que había huesos oraculares, 130 armas y 20 puntas de flechas. Conocida como la "doncella de Orleans", esta joven francesa se sintió escogida por Dios para liderar a los ejércitos franceses contra Inglaterra durante la guerra de los Cien Años. En 1429, el rey de Francia Carlos VII aceptó que liderara un ejército de cinco mil hombres durante el asedio de Orleans, de donde salió victoriosa sobre los ingleses. María Pita Mujer coruñesa que se enfrentó a las tropas británicas que querían conquistar la ciudad. María mató a un alférez inglés con una lanza, un arcabuz o un cuchillo, según las versiones, y le arrebató su bandera. Tras presenciar la muerte de su marido en el asedio, llena de rabia, y al grito de "quien tenga honra que me siga", lideró el contraataque hasta que los ingleses, al mando del corsario sir Francis Drake, se retiraron de la ciudad y pusieron rumbo a Lisboa. Felipe II reconoció el valor de María, le concedió una pensión y le dio el título de "soldado aventajado". Anne Bonny Nacida en Irlanda en 1698, fue fruto del adulterio de su padre con una criada. La familia marchó a Charleston, en Carolina del Sur, para huir de las habladurías. Anne era una joven a la que le gustaban las armas y los caballos. Se enamoró de James Bonny, un expirata con el que se casó y la pareja fue a vivir a las Bahamas. Allí Anne conoció a Jack Rackham, un famoso pirata, con quien se fugó a bordo del buque Revenge. Junto a Rackham, Anne participó en numerosos abordajes piratas y se distinguió en la lucha como cualquier otro miembro masculino de la tripulación. Al final, fueron hechos prisioneros. Jack Rackham fue ahorcado, pero Anne eludió varias veces la condena a muerte, y se cree que vivió hasta los 84 años en Carolina del Sur. Hannah Snell Nació en 1723 en Worcester (Inglaterra) y en 1744 se casó con James Summs. Su marido la abandonó cuando estaba embarazada y, tras dar a luz a una niña que murió poco después, Hannah se vistió de hombre, adoptó el nombre de James Gray y fue en busca de su esposo. Tras enterarse de que había sido ejecutado acusado de asesinato, Hannah siguió haciéndose pasar por hombre y se enroló en la Marina británica como cocinero. En la India, participó junto con sus compañeros en los combates contra los franceses, siendo herida en numerosas ocasiones, aunque no de gravedad. Tras cuatro años fue ascendida a teniente. Al llegar a Londres, reveló su secreto a sus compañeros, quienes alabaron su valentía. Recibió una pensión anual como reconocimiento a sus logros militares. Lozen Se cree que esta guerrera apache tenía 30 años cuando ella y la tribu de su hermano Victorio fueron forzados a entrar en la Reserva de San Carlos de Arizona en 1870. El lugar fue descrito como "Hell’s Forty Acres" debido a sus condiciones deplorables. Alrededor de 1877, Victorio llevó a una banda de la reserva entre los que se encontraba Lozen, y juntos asaltaron las tierras y sembraron el horror en los corazones de los colonos de Nuevo México que se habían apoderado de la tierra apache. Su hermano pudo afirmar: "Lozen es mi mano derecha, fuerte como un hombre, más valiente que la mayoría y magnífica en la estrategia. Lozen es un escudo para su pueblo." Victorio murió en una batalla mientras Lozen llevaba a una parturienta y su bebé de vuelta a la reserva. Al enterarse de la muerte de su hermano, se dispuso a ayudar a los supervivientes. Desde ese momento, Lozen formaría parte del movimiento en busca de venganza que arrasaría las tierras que encontrasen por Nuevo México en 1881. Más tarde continuaría luchando al lado de Gerónimo y tras su rendición, Lozen fue capturada para morir de tuberculosis siendo prisionera de guerra. Su cuerpo fue devuelto a su tribu para poder ser enterrada en un lugar de honor de acuerdo con la tradición apache. Tomoe Gozen Guerrera que aparece en el famoso Heike Monogatari. Allí se la describe con mucho entusiasmo: "Era muy hermosa, con piel blanca, largo cabello y rasgos encantadores". También era una arquera notablemente fuerte, y como espadachina valía por mil. Siempre estaba lista para enfrentarse a un demonio o un dios, a pie o a caballo. Manejaba potros sin domar con habilidad soberbia, cabalgaba sin hacerse un rasguño a través de peligrosos senderos. Cuando la batalla era inminente, Yoshinaka la enviaba como su primera capitana, equipada con una resistente armadura, una espada de enorme tamaño y un poderoso arco. Nakano Takeko Nacida en Edo (Tokio) en 1847, era hija del oficial Nakano Genai. La joven aprendió arte, literatura y artes marciales. Nakano se convirtió en una gran guerrera samurái, en una onna bugeisha. Cuando estalló la guerra civil entre el shogunato Tokugawa, al que ella servía, y las tropas imperiales, se puso al frente de un grupo de mujeres samuráis a las que ella había entranado personalmente. Tomó parte en la batalla de Aizu, donde luchó con gran arrojo. Pero un impacto de bala en el pecho la dejó herida de muerte. Nakano entonces decidió llevar a cabo un seppuku o suicidio ritual asistida por su hermana, que le cortó la cabeza para enterrarla a los pies de un árbol en el templo Hokaiji, donde aún hoy es venerada. Agustina de Aragón Joven nacida en Reus, que había acompañado a su marido, cabo de artillería, a Zaragoza. Tras haber caído los defensores de la puerta del Portillo, las tropas francesas se prepararon para tomarla al asalto. Entonces Agustina tomó la mecha de manos de un artillero herido y logró disparar un cañón sobre los franceses, que se batieron en retirada. La leyenda cuenta que, enterado el general Palafox de tal hazaña, concedió a la joven el distintivo de subteniente. Al parecer, Palafox, en efecto, admitió a Agustina en el cuerpo de artilleros, como artillero raso. Fuentes: |